Gracias a su gran resistencia, los reptiles pudieron llegar a las islas por su propia cuenta. Esto es el caso de los lagartos, perenquenes y lisas, que forman una propia especie en la mayoría de las islas.
Pueden sobrevivir varios días sin comida y también parecen tolerar el traslado en balsas de vegetación de isla a isla que incluye el contacto con agua salada. Llegaron, pero no cruzan con frecuenca, los brazos de mar entre islas siguen siendo un gran obstáculo para ellos, de modo que diferentes especies podrían desarrollarse en las diferentes islas. 14 especies de reptiles viven en las islas. En Fuerteventura también se han registrado hallazgos de serpientes fósiles de la familia de las boas, y se han descubierto dos especies de tortugas terrestres gigantes fósiles con un caparazón de más de 1 m de longitud en Tenerife (Geochelone burchardi) y Gran Canaria.
Lagartos
Los lagartos de las Islas Canarias (Lacertidae – 7 especies) parecen tener todos un ancestro común que vino de África a las islas hace 30 millones de años en el clima húmedo del Terciario (probablemente sobre vegetación flotante). Las especies «pequeñas» Gallotia galloti (Tenerife y La Palma, cada una con su propia subespecie), G. atlantica (Fuerteventura), G. caesaris (La Gomera y El Hierro) son todavía relativamente comunes. Como no tenían competencia de alimentos en las islas, podían extenderse y adaptarse sin obstáculos. Así que se han hecho cargo del nicho ecológico de los grandes herbívoros. Se han desarrollado parientes más grandes.
Las grandes especies fueron un alimento caido del cielo después de la colonización de las islas por los humanos alrededor del 500 AC, por lo que no quedan muchas. De los «lagartos gigantes» sólo los de Gran Canaria (Gallotia stehlini) siguen presentes en gran número, pero son diezmados allí por las culebras reales de California que se escaparon de terrarios. A su vez, esta especie ha dado el salto a Fuerteventura, Tenerife y El Hierro. Seguramente en su tiempo hubo muchos en estas islas, pero ahora sólo quedan unos pocos ejemplares de Gallotia intermedia (370 en Teno y 1000 en Guaza), Gallotia simonyi (El Hierro, animal símbolo de la isla) y G. bravoana (La Gomera).
Parece haber una tendencia a que estas grandes especies disminuyan de tamaño. Los restos fósiles de especies muy similares (G. goliat) indican una longitud total de 150 cm. Las posibles razones para esta reducción podrían ser la competencia por la comida de los herbívoros introducidos como los conejos, la amenaza de los depredadores como las ratas, los gatos y los humanos, así como la destrucción del hábitat.
Un artículo en Gomera-noticias da información detallada sobre la especie G. bravoana. Los lagartos gigantes son importantes exterminadores de insectos para la agricultura y como fructivores son importantes distribuidores de las semillas de la mayoría de las plantas frutales.
En las zonas con poca oferta de alimentos y un mayor número de turistas, los lagartos en algunos lugares están tan acostumbrados a los seres humanos y a sus restos que acuden en grupos a las zonas de picnic tan pronto como aparece un grupo de personas. En La Gomera, esto se puede observar en verano en la cima del Garajonay o en La Mérica.
En las zonas vinícolas se colocan trampas para lagartos para evitar que los animales comedores de uvas trepen a las viñas. Los principales enemigos son los cernícalos, pero también los alcaudones consiguen algunos de los especímenes más pequeños. En la foto se pueden ver algunos cráneos de lagarto, que fueron ensartados en una forma típica por el pájaro enmascarado para su despensa en un espino enmarañado.
Lisas
Las lisas (Scincoidae) se parecen a los lagartos, pero se mueven como serpientes, aunque tengan patas pequeñas. Hay 5 especies en las Islas Canarias (excepto en La Palma). Principalmente en zonas con murallas o grietas en las rocas con vegetación poco densa y suelo erosionado, encontramos las especies Chalcides viridanus (en Tenerife) y Chalcides coeruleopunctatus (en La Gomera y El Hierro), Chalcides sexlineatus (en Gran Canaria) y Chalcides simonyi en (Fuerteventura, Lanzarote y Lobos). Esta última especie está muy amenazada debido al abandono y la decadencia de las tierras cultivadas.
A diferencia de otros reptiles ponedores de huevos, las especies locales de lagartijas son vivíparas, los embriones son alimentados por el organismo materno. Las lisas «recién nacidas» sólo miden unos pocos centímetros de largo, pero cuando alcanzan una longitud corporal de entre 15 y 30 cm. Se alimentan principalmente de insectos.
Perenquenes
Los perenquenes son significativamente más pequeñas con una longitud máxima de unos 12 cm y son fáciles de distinguir gracias a sus grandes ojos, que están adaptados a la actividad principalmente nocturna. Por la noche se pueden encontrar en las zonas rurales, o incluso en las habitaciones, a la caza de insectos. Están representados por diferentes especies en las islas. El perenquén de Tenerife (Tarentola delalandii) vive en Tenerife y La Palma, el perenquén de la Gomera (Tarentola gomerensis) adivina dónde, Tarentola boettgeri hierrensis en El Hierro, T. angustimentalis en Lanzarote y Fuerteventura y Tarentola boettgeri boettgeri en Gran Canaria.
Especies introducidas
Varias especies de reptiles han sido introducidas en otras islas, como la Gallotia stehlini de Gran Canaria en Fuerteventura, pero también se pueden encontrar especies exóticas en Canarias hoy en día. Varias especies de tortugas aparecen en las reservas de agua dulce, pero probablemente no se reproducen.
En Tenerife y Gran Canaria, cerca de las ciudades portuarias, se encuentra el Hemidactylus turcicus, una especie de perenquén del mediterráneo de 13 cm de largo que se propaga con el tráfico marítimo (las hembras de esta especie pueden almacenar esperma hasta 6 meses y así fertilizar gradualmente hasta 6 nidadas de 2 huevos cada una).
Serpientes
La culebrilla ciega de las macetas (Ramphotyphlops braminus) de Nueva Guinea se ha hecho famosa en los últimos años como plaga (lamentablemente, no se la ve). Mas bién se parece a una lombriz y su estilo de vida subterraneo no la pone al alcance del observador.
La culebra real californiana (Lampropeltis getula californiae, hasta 1,7 m, media 1,2 m, diferentes coloraciones), que suele mantenerse en terrarios, ha aparecido en el sur de Gran Canaria en los últimos años y se ha convertido en una grave amenaza para los lagartos gigantes y otros reptiles de allí.
La población más densa se encuentra en la zona alrededor del pueblo de Telde. La culebra real se puede encontrar en cualquier terreno entre 0 y 1800 m de altitud, se alimenta de todos los animales pequeños y sus huevos y es más activa entre 15 y 31 grados.
Durante los años 2011 – 2015, un promedio de más de 500! se han capturado especímenes. En 2019 se capturaron del 01.01 al 12.09 un número mucho más elevado: 981 especímenes!
Se estima que la población es de unos 20.000 ejemplares. En 2018, según otra fuente, las estimaciones del número de animales salvajes han aumentado a 30.000. Por lo tanto, los hallazgos deben ser comunicados en cualquier caso. Para los humanos es completamente inofensivo, especialmente para los lagartos y mofetas endémicos es un peligro serio. Un proyecto «Life» financiado por la UE está tratando de explicar las conexiones y mantener los efectos pequeños.
